No me lo digas con flores nº10

Rui le confiesa a Tsukushi que, aunque siente ternura por ella, no es ni por asomo lo mismo que sentía por Shizuka. A pesar de su tristeza, Tsukushi le está agradecida por su sinceridad. Pero un nuevo problema llama a su puerta: a su padre lo despiden y deben mudarse a un apartamento minúsculo, ya que la madre de Tsukushi sigue decidida a que su hija haga un buen matrimonio permaneciendo en Etoku. Tsukushi intenta buscar otro trabajo para ayudar a su familia, pero no es tan fácil. Domyoji, más afectado de lo que quiere reconocer por la relación entre Tsukushi y Rui, decide irse a vivir con sus padres a Nueva York, Pero lo que Tsukushi no entiende es por qué le afecta más que Domyoji vaya a Nueva York a vivir que el que su amado Rui se fuera a Francia para estar con Shizuka. . .